
Suplementos de omega-3: ¿mejor triglicéridos, ésteres etílicos o fosfolípidos?

No todos los suplementos de Omega 3 de origen marino contienen los mismos ingredientes. Las diferencias no se limitan a la concentración y los porcentajes de Omega 3 bioactivo (EPA y DHA), sino también a la forma química en la que están presentes, una característica de la que depende la capacidad del cuerpo humano para absorberlos y hacerlos llegar a donde más los necesita. ¿Qué preferir entre triglicéridos, ésteres etílicos y fosfolípidos? ¿Aceite de pescado, aceite de krill o aceite de microalgas? ¡Averigüémoslo!
Los suplementos de omega 3 EPA y DHA ocupan una parte nada desdeñable del mercado. Los ingredientes con los que pueden elaborarse responden a diferentes necesidades de los consumidores. Junto a los productos más tradicionales a base de aceite de pescado encontramos suplementos con aceite de krill (útil, por ejemplo, en caso de alergia al pescado) o con aceite de microalgas (potencialmente apto para veganos).
Pero la fuente de EPA y DHA también puede hacer algo más que satisfacer las demandas de quienes los toman, porque la biodisponibilidad del Omega 3 en el suplemento que acaba en el mercado también depende de la fuente (y de los procesos a los que se somete).
Por desgracia, no siempre se ha prestado la debida atención a esta característica. Sin embargo, la absorción de las grasas poliinsaturadas es un fenómeno complejo y de la biodisponibilidad del EPA y el DHA pueden depender los beneficios de la suplementación.
¿De qué depende la biodisponibilidad del Omega 3?
De hecho, la biodisponibilidad es uno de los factores de los que depende la cantidad de un nutriente realmente disponible para el organismo, y este principio también se aplica al Omega 3.
Entendida en sentido estricto, la biodisponibilidad es la velocidad a la que una sustancia se absorbe en el intestino y entra en el torrente sanguíneo. En un sentido más estricto, en cambio, es la cantidad de la sustancia que llega al torrente sanguíneo o al lugar donde se supone que ejerce su acción.
De las dos, la segunda definición es la más interesante cuando se quiere comprender qué cantidad del Omega 3 ingerido puede realizar la función para la que se tomó. Por ello, el parámetro que se suele medir para evaluarlo es el denominado Índice Omega-3que es el porcentaje de EPA y DHA sobre el total de grasas en las membranas de los glóbulos rojos; es a partir de las membranas celulares, de hecho, que los Omega 3 realizan muchas de sus renombradas funciones biológicas.
A su vez, la biodisponibilidad de un nutriente varía en función de varios factores. En el caso de los omega-3 de los complementos alimenticios, su forma química desempeña un papel importante.
Triglicéridos, ésteres etílicos y fosfolípidos: EPA y DHA en complementos alimenticios
Sí, porque dentro de sus fuentes, el Omega 3 puede estar presente unido a diferentes moléculas.
Como ya se ha mencionado, las principales materias primas para la producción de suplementos de EPA y DHA son los aceites obtenidos del pescado (en particular, del hígado de bacalao y de pescados grasos como el salmón y las sardinas), del krill antártico(Euphausia superba) y de microalgas (en particular, de especies de Schizochytrium).
Estas fuentes difieren tanto en la cantidad como en la forma de Omega 3 presente en ellas:
- Enel aceite de pescado natural, el EPA y el DHA están presentes principalmente como triglicéridos(TG) y, en menor medida, como ácidos grasoslibres (FFA);
- en elaceite de pescado concentrado (que se utiliza ampliamente para producir suplementos de EPA y DHA suficientemente concentrados) están presentes en forma de ésteres etílicos(EE) o triglicéridos reesterificados(rTG, una forma similar a los TG que se encuentran en el aceite de pescado natural, pero más concentrados en Omega 3). El aceite de pescado concentrado y reesterificado también puede contener una proporción de EPA y DHA en forma de diglicéridos(diacilglicéridos, DGA) y monoglicéridos(monoacilglicéridos, MGA). Además, mientras que los aceites de pescado naturales contienen aproximadamente un 18% de EPA y un 12% de DHA, los aceites de pescado concentrados contienen hasta un 90% de EPA y DHA;
- Enel aceite de krill, el EPA y el DHA están presentes como TG, FFA, DGA, MGA y, en gran medida,fosfolípidos (Phospholipids, PL);
- Los aceites de microalgas pueden contener FFA y TG, y se han descrito casos en los que se han enriquecido con EE, rTG y PL.
La diferente biodisponibilidad de estas moléculas depende de cómo se procesan y absorben en el intestino.
Tras su ingesta, todos estos aceites se reducen a pequeñas gotitas que se emulsionan con ácidos biliares para facilitar el trabajo de las enzimas digestivas, capaces de desprender los Omega 3 de las moléculas a las que están unidos. Esto permite la absorción de EPA y DHA en los intestinos, seguida del reensamblaje de los Omega 3 en forma de triglicéridos y la formación de quilomicrones que los transportarán al torrente sanguíneo.
Los PL de aceite de krill parecen ser la forma más biodisponible. Su doble naturaleza -parte liposoluble y parte hidrosoluble- facilita su emulsificación, mientras que su capacidad para formar partículas mixtas de grasa facilitaría su absorción. También parece que los omega-3 unidos a PL se incorporan más fácilmente a los tejidos que los unidos a triglicéridos.
Le siguen, en orden decreciente de biodisponibilidad ,los triglicéridos reesterificados y los TG naturales. Los TG naturales son probablemente más difíciles de "cortar" que los TG reesterificados. Además, la absorción de los rTG parece verse favorecida por su asociación con DAG y MAG.
Los EE son los últimos en orden de biodisponibilidad. Los estudios in vitro sugieren que esto se debe, al menos en parte, a una menor eficacia de la enzima que los procesa antes de la absorción, lo que ralentizaría la absorción. No sólo eso, la forma EE también dificultaría la reagrupación del Omega 3 en forma TG tras la absorción.
Los ácidos grasos libres también parecen ser más biodisponibles que los EE; esto justificaría la mayor biodisponibilidad del aceite de krill en comparación con el aceite de pescado encontrada en algunos estudios. Sin embargo, son formas fácilmente oxidables y, por lo tanto, con riesgo de alteraciones gastrointestinales, por lo que generalmente se eliminan durante los procesos de producción.
Efectos sobre la salud
Toda esta información parece conducir a una sugerencia: es mejor preferir los aceites en los que el Omega 3 está presente en formas distintas de los ésteres etílicos y, de éstos, preferir los fosfolípidos o triglicéridos reesterificados.
Sin embargo, queda otro aspecto por verificar: si la mayor biodisponibilidad de los fosfolípidos se corresponde también con mayores beneficios.
No son pocos los estudios que lo han investigado, hasta el punto de que un grupo de expertos dirigido por Myeong Gyu Kim, de la Universidad CHA (Pocheon, Corea del Sur), pudo llevar a cabo un metaanálisis en el que se comparaban los efectos del aceite de krill y del aceite de pescado en cuanto a su capacidad para alterar los niveles de triglicéridos en sangre (uno de los principales beneficios de la ingesta de Omega 3).
Los 64 ensayos controlados aleatorizados incluidos en el análisis mostraron que la diferencia neta en los niveles de triglicéridos, colesterol "malo" (LDL), colesterol "bueno" (HDL) y colesterol total no era significativamente diferente según se tomara aceite de krill o aceite de pescado.
Basándose en estos resultados, publicados en Nutrition Review en 2020, Kim y sus colegas concluyeron que, más que de la forma química,"la reducción de los triglicéridos depende de la dosis de ácidos grasos omega-3 ingerida".
Parece, por tanto, que tantoel aceite de pescado como elaceite de krill son ingredientes viables para elaborar productos de Omega 3 de calidad con los que conseguir los beneficios deseados de la suplementación de estas valiosas grasas poliinsaturadas.
¿Yel aceite de microalgas? A menudo se presenta como una alternativa al aceite de pescado o de krill para quienes no consumen productos animales, pero según un estudio publicado en elEuropean Journal of Nutrition en 2023, también es una opción viable para los omnívoros.
Referencias bibliográficas:
Cholewski M, Tomczykowa M, Tomczyk M. A Comprehensive Review of Chemistry, Sources and Bioavailability of Omega-3 Fatty Acids. Nutrients. 2018 Nov 4;10(11):1662. doi: 10.3390/nu10111662.
García-Maldonado E, Alcorta A, Zapatera B, Vaquero MP. Cambios en los niveles de ácidos grasos tras el consumo de un novedoso suplemento docosahexaenoico procedente de algas: ensayo controlado aleatorizado cruzado en omnívoros, lacto-ovo vegetarianos and veganos. Eur J Nutr. 2023 Jun;62(4):1691-1705. doi: 10.1007/s00394-022-03050-3
Kim MG, Yang I, Lee HS, Lee JY, Kim K. Lipid-modifying effects of krill oil vs fish oil: a network meta-analysis. Nutr Rev. 2020 Sep 1;78(9):699-708. doi: 10.1093/nutrit/nuz102
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