Obesidad: el consumo de Omega-3 ayuda a reducir la ingesta de energía
Obesidad: el aceite de pescado ayuda a reducir el consumo de energía
La suplementación conOmega-3 DHA (ácido docosahexaenoico) puede ser útil para limitar la ingesta de calorías en mujeres obesas o con sobrepeso. Esta acción se debe a la capacidad del Omega-3 para reducir el apetito. Aunque aún no se han establecido sus efectos sobre el peso corporal, el DHA puede ser útil en el tratamiento de la obesidad y las enfermedades relacionadas.
Así se desprende de un estudio publicado en la revista Nutrition Research y realizado por investigadores de la Universidad de Sheffield y Obsidian Research Ltd (Reino Unido), con el objetivo de identificar los efectos del DHA y el ácido oleico sobre el peso corporal
Los ácidos grasos omega-3 y saturados influyen en el apetito
La sensación de hambre está regulada por diversos mecanismos fisiológicos que incluyen la acción de hormonas, neurotransmisores y péptidos. La colecistoquinina, por ejemplo, una hormona producida por el intestino tras una comida rica en grasas, favorece la sensación de saciedad. Numerosos estudios han demostrado que los ácidos grasos poliinsaturados Omega-3 son capaces de estimular la liberación de esta hormona, y por tanto de reducir el apetito, más que los ácidos grasos saturados o monoinsaturados. De los ácidos grasos monoinsaturados, el ácido oleico, presente en todas las grasas animales y aceites vegetales, es el más común.
El DHA limita la ingesta de grasas, carbohidratos y calorías
El estudio, dirigido por Charlotte Harden, duró 12 semanas y en él participaron 40 mujeres de entre 23 y 60 años con sobrepeso u obesidad. Las voluntarias se dividieron aleatoriamente en dos grupos y recibieron diariamente un suplemento rico en ácido oleico o en DHA sin conocer su composición. El suplemento se administró en forma de emulsión de aceite en agua. Cada participante en el estudio también rellenó un diario de alimentos para aportar información sobre su dieta durante el tratamiento.
Los resultados, obtenidos de las 27 mujeres que habían completado el ensayo, mostraron que las voluntarias tratadas con DHA habían seguido, en comparación con el otro grupo, una dieta menos energética y habían consumido menos grasas e hidratos de carbono. Aunque no se apreciaron cambios en la composición corporal, sí se observó una ligera disminución (del 5%) del peso corporal inicial en el 39% de las mujeres que habían recibido Omega-3 y sólo en el 7% de las que habían recibido ácido oleico. Aunque esta diferencia no es significativa desde el punto de vista estadístico, los resultados están a la altura de tratamientos anteriores, aprobados clínicamente, en los que el 33% de los sujetos perdieron el 5% de su peso inicial tras un año de tratamiento.
La acción de los omega-3
Los investigadores plantean la hipótesis de que los Omega-3, además de actuar regulando la saciedad, son capaces de limitar el crecimiento de las células grasas y, en cambio, favorecen la oxidación de los ácidos grasos y, por tanto, su consumo. Este estudio sienta las bases de nuevas investigaciones que podrían aclarar la influencia de los Omega-3 en la pérdida de peso corporal.
Según los investigadores, los estudios futuros deberían incluir a más sujetos y a varones; utilizar suplementos de Omega-3 no emulsionados; y perfeccionar la recogida de información sobre la evaluación de la dieta. Para estar al día de las últimas novedades de la investigación científica sobre Omega-3, suscríbase a nuestro boletín.
Fuente: Charlotte J. Harden, Victoria A. Dible, Jean M. Russell, Iveta Garaiova, Sue F. Plummer, Margo E. Barker, Bernard M. Corfe 'Long-chain polyunsaturated fatty acid supplementation had no effect on body weight but reduced energy intake in overweight and obese women' Nutrition Research doi:10.1016/j.nutres.2013.10.004