Los omega-3 mejoran las capacidades cognitivas de los niños

La suplementación con omega 3 mejora las funciones neuropsicológicas en niños desnutridos. Tres meses de tratamiento con EPA (ácido eicosapentaenoico) y DHA (ácido docosahexanoico) bastan para mejorar la atención, la coordinación, las funciones ejecutivas y la velocidad de los procesos de información.

Éste es el resultado de un estudio realizado por investigadores de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (México), la Universidad de Granada (España) y la Universidad de Carolina del Norte (EE.UU.). La investigación, publicada en la revista Research in Developmental Disabilities, es una de las pocas que han considerado el papel del Omega-3 en el rendimiento cognitivo de niños y preadolescentes desnutridos.

Los niños y la malnutrición

Aunque el estudio se realizó en niños mexicanos, la desnutrición es un problema que también afecta a muchos otros países. Se calcula que en América, en 2012, el 14,5% de los hogares sufría inseguridad alimentaria en determinadas épocas del año y el 5,7% vive en un estado de inseguridad alimentaria grave. Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, 3,9 millones de familias no pueden satisfacer adecuadamente las necesidades alimentarias de sus hijos. La desnutrición en los primeros años de la infancia puede tener graves efectos en el crecimiento y la maduración de los órganos, y si se prolonga hasta una edad más avanzada, puede afectar a las capacidades cognitivas y educativas.

Los omega-3 mejoran los parámetros cognitivos 

En el estudio participaron 59 niños desnutridos de entre 8 y 12 años. Un grupo de ellos recibió 180 mg diarios de DHA y 270 mg de EPA, y el otro, un placebo. Se evaluaron 18 parámetros cognitivos de cada uno al principio y al final del tratamiento, que duró tres meses. Los resultados mostraron que en el grupo que había recibido Omega-3, hasta el 50% de los niños mejoraron en 11 de las 18 variables estudiadas.

Los efectos no fueron visibles en el grupo placebo. En concreto, la coordinación, la atención, la integración perceptiva y la función ejecutiva mejoraron en más del 70% de los niños tratados con EPA y DHA. La investigación no mostró diferencias con respecto a la memoria, contrariamente a las suposiciones iniciales de los investigadores y a estudios anteriores. Según los científicos que llevaron a cabo la investigación, el aumento de la memoria evidente en ambos grupos puede deberse a estímulos externos más que a la suplementación con EPA y DHA. Este estudio es el primero que tiene en cuenta los cambios en cada sujeto individual y, por tanto, arroja luz sobre la importancia clínica de la suplementación más allá de la significación estadística.

Un resultado importante que hay que seguir investigando

Basándose en los resultados, puede concluirse que los Omega-3 mejoran el rendimiento cognitivo, pero no la memoria, mostrando así una cierta especificidad de los efectos positivos. Aunque no cabe duda de los beneficios de los Omega-3 en estos niños, que los tomaban habitualmente en pequeñas cantidades, hay que tener en cuenta que 3 meses de tratamiento puede ser un tiempo demasiado corto para estudiar el cambio en las capacidades cognitivas Harán falta más estudios con diferentes modelos experimentales para confirmar lo que se ha comunicado. 

Fuente : Verónica Portillo-Reyes, Miguel Pérez-García , Yolanda Loya-Méndez ,Antonio E. Puente 'Clinical significance of neuropsychological improvement after supplementation with omega-3 in 8-12 years old malnourished Mexican children: A randomised, double-blind, placebo and treatment clinical trial'.Research in Developmental Disabilities, Volume 35, Issue 4, April 2014, Pages 861-870.