Hemorragia perioperatoria: el aceite de pescado rico en omega-3 es seguro y reduce el número de transfusiones necesarias
Los suplementos de aceite de pescado no favorecen las hemorragias postoperatorias en pacientes de cirugía cardíaca; al contrario, reducen el número de transfusiones de sangre necesarias tras la intervención. Estos nuevos hallazgos apoyan la necesidad de reconsiderar las recomendaciones actuales que desaconsejan el uso de suplementos de omega-3 antes de la cirugía cardíaca porque se cree que provocan hemorragias.
Así lo descubrieron investigadores de la Facultad de Medicina Sanford de la Universidad de Dakota del Sur (EE.UU.) y lo publicaron el mes pasado en la revista Circulation. De hecho, no existen pruebas científicas significativas que asocien las hemorragias incontroladas con el uso de suplementos de omega-3. Sin embargo, algunos estudios realizados en los últimos años han demostrado lo contrario; como una revisión sistemática publicada en la revista Danish Medical Journal, que analizó los datos de 16 estudios de pacientes sometidos a cirugía y demostró que los suplementos de aceite de pescado no aumentaban el riesgo de hemorragia o sangrado (https://www.omegor.com/blog-omega-3/speciali-omega-3/omega-3-operazioni-chiururgiche/emorragia-chirurgica-integratori-olio-pesce-non-aumentano-rischio-sanguinamento/).
Además, aunque se ha demostrado que el EPA tiene poder anticoagulante, no hay pruebas concluyentes de su papel en la cirugía.
Los suplementos de omega-3 no causan hemorragias en pacientes de cirugía cardiaca
En el nuevo estudio, los investigadores realizaron un análisis secundario con datos de un estudio previo a gran escala, denominado OPERA, que se llevó a cabo para investigar el papel de los omega-3 en la aparición de fibrilación auricular en el postoperatorio. El número de hemorragias y de unidades de sangre necesarias para transfusión fue uno de los hallazgos secundarios de esta investigación. Los resultados mostraron que la suplementación con suplementos de aceite de pescado no tenía ningún efecto sobre la fibrilación auricular postoperatoria, pero, sorprendentemente, otros datos mostraron una reducción significativa del número de unidades de sangre necesarias para transfusión, y que cuanto mayor era el nivel de EPA y DHA en la sangre la mañana de la cirugía, menor era el riesgo de hemorragia para el paciente operado.
Según los investigadores, estos nuevos hallazgos apoyan la necesidad de reconsiderar las recomendaciones actuales que sugieren que el consumo de aceite de pescado debe interrumpirse antes de la cirugía cardíaca, según el profesor Bill Harris, coinventor delÍndice Omega-3. El Índice Omega-3 es un parámetro que expresa el porcentaje de EPA y DHA respecto al total de ácidos grasos en los glóbulos rojos, y es un indicador estable a largo plazo del estado de omega-3 que refleja con precisión los niveles de EPA y DHA de un individuo. Un índice de omega-3 entre el 8% y el 12% se considera el rango óptimo para reducir el riesgo cardíaco.
Algunos detalles del estudio
En el estudio OPERA participaron 1.516 pacientes, con una edad media de 63 años, sometidos a cirugía cardiaca que incluía injerto de bypass coronario y valvular. Los pacientes se dividieron aleatoriamente en dos grupos, que recibieron omega-3 o un placebo. Entrando en detalles: el grupo de tratamiento recibió altas dosis de EPA y DHA (de 6,5 a 8 gramos en total) de dos a cinco días antes de la intervención quirúrgica, y luego se les administró 1,7 gramos de omega-3 la mañana de la cirugía. El mantenimiento de la dosis continuó hasta que los pacientes fueron dados de alta.
El resultado primario del estudio OPERA era comprobar si estas dosis agudas de omega-3 reducían el riesgo de fibrilación auricular postoperatoria, una complicación desagradable y potencialmente peligrosa de la cirugía. El estudio no encontró ningún efecto al respecto. Sin embargo, el equipo de Harris también examinó los datos de los criterios de hemorragia e identificó el número de unidades de sangre necesarias para transfusiones en los pacientes operados, descubriendo no sólo que cuanto mayor era el nivel de EPA y DHA en la sangre la mañana de la cirugía, menor era el riesgo de hemorragia, sino también una reducción significativa del número de unidades de sangre utilizadas para transfusiones en los pacientes que habían tomado omega-3, en comparación con el grupo placebo.
Las mediciones de la hemorragia se realizaron utilizando una pequeña cuchilla de afeitar para hacer cortes en el brazo y teniendo en cuenta el tiempo necesario para la coagulación. Como afirmó el propio Harris, estas pruebas no se correlacionan con la complejidad de la cirugía cardiaca, en la que los cortes son grandes y no se conoce bien el papel de la inflamación, por lo que es necesario seguir estudiándolas.
El aceite de pescado es seguro y no es necesario interrumpir su administración antes de la intervención quirúrgica.
Según los investigadores, el reciente estudio demuestra que los suplementos de aceite de pescado no aumentan las hemorragias en las fases postoperatorias y reducen el número de transfusiones de sangre. Además, se observó que los niveles más altos de omega-3 se asociaban a un menor riesgo de hemorragia. Estos nuevos hallazgos apoyan la necesidad de reconsiderar las recomendaciones actuales de interrumpir la administración de suplementos de omega-3 en las proximidades de una intervención quirúrgica, aunque su papel en la coagulación requiere más investigación.
and Fuente: Emmanuel Akintoy, et al. "Fish Oil Perioperative Bleeding.Insights From the OPERA Randomised Trial". Circulation.