EE.UU.: El ejército cree que el aceite de pescado puede ayudar contra las tentaciones suicidas

Años de investigación sugieren que los ácidos grasos omega-3 protegen la salud mental reduciendo el riesgo de desarrollar ansiedad, depresión y otros trastornos graves del comportamiento. Un nuevo estudio probará si tomar productos enriquecidos con estos nutrientes representa una oportunidad terapéutica válida para reducir el riesgo de suicidio. Pronto comenzará un nuevo estudio para comprobar si los omega-3 pueden ayudar a reducir el riesgo de trastornos psicológicos y de suicidio. Al frente de la investigación estarán Bernadette Marriott y Hugh Myrich, de la Universidad Médica de Carolina del Sur, que probarán el efecto de tomar un batido enriquecido con omega-3, ya distribuido en el mercado europeo, sobre la salud mental de los individuos que participen en el estudio.

¿Por qué Omega-3?

La elección de los omega-3 como posible coadyuvante en la reducción del riesgo de suicidio se basa tanto en los resultados de investigaciones anteriores como en la necesidad de arrojar luz sobre la implicación de estos ácidos grasos en los trastornos psicológicos. Mientras que algunos estudios no han logrado establecer una correlación entre los niveles de omega-3 y problemas como la ansiedad o la depresión, otros apuntan en una dirección completamente opuesta, sugiriendo una protección contra la depresión, la adicción al abuso de sustancias y otros trastornos mentales. Una investigación publicada en la revista Nutritional Neuroscience ha revelado, por ejemplo, que la flexibilidad cognitiva y las funciones ejecutivas están asociadas a la disponibilidad de estos nutrientes. 

Por el contrario, un estudio publicado en el Journal of Clinical Psychiatry en 2011 descubrió que los soldados (hombres) con niveles bajos de ácido docosahexaenoico (el omega-3 conocido por las siglas DHA) tenían un riesgo de suicidio un 62% mayor que aquellos con los niveles más altos de este omega-3. A pesar de los resultados de estas investigaciones, actualmente no es posible afirmar que exista una causalidad, es decir, que sea la carencia de omega-3 lo que induce al suicidio. No sólo eso, sino que los beneficios de la ingesta de Omega-3 se extienden mucho más allá de sus efectos sobre la salud psicológica, abarcando todos los demás aspectos del bienestar sobre los que estos ácidos grasos tienen un efecto positivo: desde la salud cardiovascular hasta la reducción del riesgo de enfermedades discapacitantes como el Alzheimer.

La elección de los participantes

Marriott y sus colegas incluirán en el estudio a un grupo de veteranos estadounidenses con alto riesgo de comportamiento suicida. La elevada tasa de suicidios entre los veteranos es, de hecho, un problema de gran actualidad e importancia en el ejército estadounidense, que sólo en julio de 2012 registró 38 casos de presunto suicidio entre sus soldados, la cifra más alta desde que se inició el seguimiento. Sin embargo, el suicidio es un problema que también se extiende fuera del ejército, y en Estados Unidos es la cuarta causa de muerte en el grupo de edad de 18 a 65 años.

Afortunadamente, los análisis realizados por el Istat han revelado que Italia es uno de los países de la OCDE con la tasa de mortalidad por suicidio más baja y que entre 1993 y 2009 se produjo un descenso continuo de la incidencia de los suicidios. No obstante, sigue habiendo 6,7 personas por cada 100.000 habitantes que deciden quitarse la vida cada año, un total de unas 3.800 personas. Los omega-3 podrían ser una ayuda válida y barata para frenar aún más este fenómeno.

El bienestar psicológico está en un batido de Omega-3

El nuevo estudio consiste en la ingesta diaria, durante 6 meses, de 2 batidos enriquecidos con Omega-3 o 2 batidos a los que no se han añadido estos valiosos ácidos grasos. Marriott explicó que la elección del producto a utilizar en el estudio vino dictada por su excelente sabor y la ausencia de efectos secundarios asociados a su ingesta. Aparte de la forma de administración, este nuevo estudio arrojará más luz sobre el papel que desempeña el Omega-3 en la determinación de la tendencia suicida.   

Fuentes Lewis MD, Hibbeln JR, Johnson JE, Hong Lin Y, Hyun DY, Loewke JD, "Suicide Deaths of Active-Duty US Military and Omega-3 Fatty-Acid Status: A Case-Control Comparison", J Clin Psychiatry, 23 de agosto de 2011 Johnston DT, Deuster PA, Harris WS, Macrae H, Dretsch MN, "Red blood cell omega-3 fatty acid levels and neurocognitive performance in deployed U.S. Servicemembers", Nutr Neurosci. 2012 Jun 28