Sistema nervioso

El omega-3 aumenta las conexiones entre neuronas: el estudio de los monos

Suplementos de omega-3: más conexiones entre neuronas gracias al aceite de pescado

Una dieta rica en Omega-3 DHA (ácido docosahexaenoico) favorece el desarrollo saludable del cerebro. De hecho, los macacos que lo consumen en cantidades elevadas tienen una corteza cerebral con muchas conexiones y una organización similar a la del cerebro humano, mientras que los que siguen una dieta baja en Omega-3 presentan una red neuronal más limitada.

Así lo han descubierto científicos de la Oregon Health & Science University (EE UU). El estudio, publicado en la revista Journal of Neuroscience, confirma el papel del Omega-3 en el correcto desarrollo del cerebro.


El omega-3 influye en el desarrollo del sistema nervioso

El DHA es el principal componente de las membranas celulares de las neuronas, dándoles la fluidez que necesitan para crecer, conectarse con otras células y transmitir más rápidamente las señales nerviosas. Este ácido graso, que se encuentra principalmente en pescados grasos como el salmón, el atún y la caballa, desempeña un papel clave en el desarrollo del cerebro y el sistema visual, así como en el mantenimiento de su funcionalidad. Numerosos estudios sugieren que una concentración reducida de DHA en el cerebro durante la vida fetal provoca un deterioro del desarrollo neuronal, déficits neurocognitivos y alteraciones del comportamiento. Las investigaciones de una de las coautoras del estudio, Martha Neuringer, del Centro Nacional de Investigación de Primates de Oregón, demostraron la importancia del DHA en el desarrollo visual de los bebés.



El DHA favorece las conexiones cerebrales

El equipo de investigadores realizó el estudio en un grupo de macacos de entre 17 y 19 años del Centro Nacional de Investigación de Primates de Oregón. Algunos animales fueron alimentados con comida rica en DHA, mientras que otros recibieron una dieta baja en Omega-3. Mediante un método de resonancia magnética que visualiza las interacciones entre regiones cerebrales cuando un sujeto realiza una tarea, se observó la organización cerebral de los animales y los cambios asociados a la ingesta de DHA. Los resultados mostraron que los macacos con una dieta rica en DHA tenían una organización de la corteza cerebral, es decir, la capa externa de los hemisferios cerebrales, similar a la de un humano sano. Por ejemplo, se observaron conexiones y actividad entre zonas del cerebro similares a las que intervienen en la atención y el procesamiento de la información en los seres humanos. Por el contrario, los animales alimentados con una dieta baja en DHA mostraron una menor conectividad en el sistema visual y un deterioro de las redes corticales distribuidas.



Un hallazgo que sugieren otros numerosos estudios

El descubrimiento revela similitudes entre la organización de la corteza cerebral de humanos y macacos, en el contexto de una dieta rica en Omega-3, y apoya la hipótesis de que estos ácidos grasos son importantes para el desarrollo y mantenimiento de los sistemas neuronales, incluidos los esenciales para el desarrollo cognitivo. El siguiente paso consistirá en determinar si los monos con déficit en determinadas conexiones presentan comportamientos comparables a los de los humanos que sufren trastornos neurológicos, como el trastorno por déficit de atención y el autismo. Los científicos quieren estudiar macacos alimentados con distintas dietas desde el nacimiento para entender cómo una dieta rica en Omega-3 puede influir en las primeras etapas del desarrollo cerebral y en las posteriores.


Fuente: "David S. Grayson, Christopher D. Kroenke, Martha Neuringer, and Damien A. Fair. "Los ácidos grasos Omega-3 dietéticos modulan la organización de sistemas a gran escala en el cerebro del macaco Rhesus". The Journal of Neuroscience, 5 de febrero de 2014, 34(6): 2065-2074; doi: 10.1523/JNEUROSCI.3038-13.2014