Sistema nervioso

El ácido graso omega-3 DHA reduce los daños del ictus

Ictus: menos riesgo con ácidos grasos Omega 3

Se han confirmado los beneficios del ácido graso omega-3 DHA (ácido docosahexaenoico) contra elictus. Según un estudio de la Universidad Laval de Ville de Quebéc (Canadá), este ácido graso puede reducir en un 25% los daños derivados de este evento cerebral.

La noticia procede de las páginas de la revista Stroke, donde los autores señalan que el consumo de omega-3 DHA crea unas condiciones antiinflamatorias y neuroprotectoras en el cerebro que contrarrestan los daños causados por el ictus. De este modo, explica Jasna Kriz, coordinadora del estudio, el omega-3 previene la respuesta inflamatoria aguda que seguiría al evento, muy peligrosa para el tejido nervioso.




Modulación de la respuesta inmunitaria

Los autores de la investigación llegaron a estas conclusiones utilizando como organismo modelo ratones genéticamente predispuestos a desarrollar un ictus. Los animales se dividieron en tres grupos, cada uno de los cuales fue alimentado con diferentes cantidades de DHA. Mientras que los ratones de control recibieron una dieta desprovista de DHA, un segundo grupo recibió dosis bajas delácido graso omega-3. Las cobayas restantes consumieron aproximadamente 0,7 gramos de DHA por kg de peso corporal al día, lo que corresponde a una dosis masiva de omega-3. Al cabo de tres meses, se observó una reducción de los niveles de compuestos estimulantes de la inflamación en los ratones del tercer grupo. 


Entre ellas se encuentran la COX2, una de las proteínas responsables de la producción de prostaglandinas -factores implicados en los procesos inflamatorios- y la interleucina-1beta (IL-1beta), una molécula que favorece la inflamación -por ejemplo, durante las infecciones bacterianas-, promueve la síntesis de prostaglandinas y estimula la activación del sistema inmunitario. Además de reducir los niveles de moléculas inductoras de la inflamación, laingesta de DHA provocó un aumento de la producción de factores que contrarrestan la activación de los fenómenos de muerte celular. Y no sólo eso, la administración de dosis elevadas de DHA también provocó un aumento de la proporción de ácidos grasos omega-3 frente a los omega-6. En concreto, el ácido graso omega-3 sustituiría, al menos parcialmente, a otra molécula, el ácido araquidónico, un ácido graso omega-6 conocido por su capacidad para inducir la inflamación.




Beneficios del omega-3 para el cerebro


Según los investigadores, se trata de la primera demostración convincente de la potente acción antiinflamatoria ejercida por el DHA en el cerebro. Y, trasladado a los humanos, indicaría 42 gramos de DHA como la cantidad de Omega-3 que un hombre de 60 kg tendría que tomar diariamente para conseguir los mismos efectos que los investigadores canadienses demostraron en ratones. Sin embargo, Frédéric Calon, coautor del estudio, explicó que los ratones tienen un metabolismo más rápido que los humanos y, teniendo en cuenta las 2.000 calorías que consume, de media, un adulto, estos 42 gramos podrían reducirse a 2,5-3 gramos de DHA o EPA (ácido eicosapentaenoico, otro importante Omega-3) al día.   


Fuente:

1. Lalancette-Hébert M, Julien C, Cordeau P, Bohacek I, Weng YC, Calon F, Kriz J, 'Accumulation of Dietary Docosahexaenoic Acid in the Brain Attenuates Acute Immune Response and Development of Postischemic Neuronal Damage', Accidente cerebrovascular. 2011 Aug 18. [publicación electrónica antes de impresión].