Omega 3, valiosa ayuda en la recuperación de las conmociones cerebrales deportivas
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Omega-3 puede mitigar los cambios causados por las conmociones cerebrales relacionadas con el deporte. El DHA (ácido docosahexaenoico) parece actuar sobre los acontecimientos moleculares que se producen tras la lesión, favoreciendo la recuperación. Estos ácidos grasos pueden representar algún día una estrategia terapéutica para mejorar o prevenir las complicaciones asociadas a las lesiones deportivas.
Así se recoge en un artículo publicado en
Avances en nutrición en el que investigadores de DSM Nutritional Products en Nueva Jersey (EE.UU.) revisaron numerosos estudios que destacaban la acción del Omega-3 en las lesiones cerebrales traumáticas.
Traumatismo craneoencefálico: falta de terapia
La conmoción cerebral es una lesión frecuente entre los deportistas, sobre todo los que practican deportes de contacto como el fútbol y el hockey.
También conocida como lesión cerebral traumática leve, se define como un proceso patológico complejo que afecta al cerebro, inducido por fuerzas mecánicas traumáticas en la cabeza. Este daño suele provocar problemas de memoria, orientación y pérdida de conciencia.
Los síntomas a corto plazo de la conmoción cerebral incluyen dolores de cabeza, problemas cognitivos, sensibilidad a la luz y el sonido, irritabilidad, trastornos del sueño y pérdida de conciencia.
Los deportistas que han sufrido una conmoción cerebral tienen un mayor riesgo de sufrir lesiones posteriores, con consecuencias que pueden ser graves. Algunos estudios han sugerido que los traumatismos repetidos pueden provocar encefalopatía traumática crónica, una forma de demencia comúnmente asociada al boxeo.
Actualmente no se dispone de una terapia eficaz para estas lesiones, y el tratamiento postraumático se limita al reposo.
¿Cómo actúan los Omega-3?
El omega-3 DHA está ampliamente presente en el cerebro, donde desempeña importantes papeles estructurales y funcionales, tanto en el desarrollo como en el mantenimiento de las funciones cognitivas a lo largo de la vida.
En consonancia con estas funciones, estudios científicos sugieren que el DHA puede actuar positivamente en la recuperación de lesiones cerebrales traumáticas.
Según algunas investigaciones, el contenido de DHA en el cerebro se reduce tras un traumatismo, lo que sugiere la necesidad de esta molécula en la recuperación.
Los posibles beneficios neuroprotectores del Omega-3 se derivan de estudios en animales que demuestran que los suplementos, antes o después de una conmoción cerebral, pueden limitar los daños en el axón, la estructura de la neurona que se ve especialmente perjudicada en los traumatismos.
El Omega-3 también parece actuar bloqueando la muerte de las neuronas dañadas.
El estrés oxidativo que se produce tras una conmoción cerebral es consecuencia de un metabolismo energético disfuncional y provoca daños en las estructuras celulares.
Por lo tanto, la normalización del metabolismo oxidativo podría reducir los daños en las membranas lipídicas. La suplementación postraumática con Omega-3, conocido por su acción antioxidante, parece mejorar esta situación.
Los traumatismos craneoencefálicos pueden alterar la liberación de ciertos neurotransmisores. La disminución de la liberación de dopamina, por ejemplo, puede ser responsable de ciertos déficits funcionales, ya que desempeña un papel importante en el aprendizaje y la memoria.
Los animales de laboratorio que recibieron suplementos de DHA y EPA (ácido eicosapentaenoico) restablecieron una mayor liberación de dopamina que los animales de control.
DHA: una posibilidad terapéutica para las lesiones traumáticas leves
En conclusión, según lo observado en estos estudios, la suplementación con DHA podría actuar reduciendo el grado de daño neuronal, inflamación, estrés oxidativo y muerte celular.
El DHA también parece promover la expresión de sustancias necesarias para una función neuronal y cognitiva adecuada.
La naturaleza convincente de estos hallazgos ha impulsado a científicos y autoridades sanitarias a seguir investigando la acción del Omega-3 en el tratamiento de las conmociones cerebrales relacionadas con el deporte, cada vez más reconocidas como un problema de salud pública.
Serán necesarios estudios controlados con seres humanos antes de poder hacer recomendaciones clínicas definitivas y, con este fin, se están realizando actualmente los primeros ensayos clínicos sobre el papel del DHA en la recuperación de lesiones cerebrales.
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Fuente: Erin Cernkovich Barrett, Michael I. McBurney, and Eric D. Ciappio. "ω-3 Fatty Acid Supplementation as a Potential Therapeutic Aid for the Recovery from Mild Traumatic Brain Injury/Concussion".
Adv Nutr Mayo 2014 Adv Nutr. vol. 5: 268-277, 2014