2 raciones de salmón aportan la cantidad de Omega-3 necesaria en el embarazo
Embarazo: comer salmón dos veces por semana mejora la salud de la madre y el bebé
Para garantizar la cantidad adecuada de Omega 3 durante el embarazo, basta con añadir a la dieta 2 raciones de salmón a la semana. Así lo demuestra un estudio realizado en la Facultad de Medicina de la Universidad de Southampton (Reino Unido) por un grupo de investigadores que participan en el proyecto europeo"Salmon in Pregnancy Study" sobre el consumo de salmón durante el embarazo. Los resultados de la investigación se publicaron en la revista American Journal of Clinical Nutrition.
Omega-3 en el embarazo: beneficios de su consumo
Los ácidos grasos omega-3 son nutrientes abundantes en los pescados marinos grasos. Tomarlos durante el embarazo aporta varios beneficios:
- reducir el riesgo de complicaciones peligrosas para la madre y el bebé;
- facilitar el intercambio de oxígeno y nutrientes;
- permitir el correcto desarrollo del feto;
- reducir la incidencia de determinadas enfermedades después del nacimiento, como el asma.
Un nuevo enfoque para aumentar los Omega-3
El aumento del consumo de salmón durante el embarazo fue examinado por los científicos para comprobar si podía aumentar los niveles de Omega-3 en las mujeres embarazadas y sus hijos. Para ello, se reclutó a 123 mujeres embarazadas caracterizadas por un bajo consumo de pescado graso. Se dividió a las participantes en 2 grupos y se les indicó que siguieran con su dieta habitual o que añadieran 2 raciones de salmón a su menú semanal. La ingesta de pescado se inició a las 20 semanas de gestación y continuó hasta el parto.
Los resultados obtenidos
El análisis de los datos reveló que las participantes que debían introducir el salmón en su dieta consumían una media de 1,94 raciones a la semana. En total, estas mujeres consumían 2,11 raciones de pescado a la semana, frente a una media de 0,47 raciones consumidas por las demás participantes. Este mayor consumo de pescado se asoció a unamayor ingesta de los dos Omega-3 en los que es rico el pescado:EPA (ácido eicosapentaenoico) y DHA (ácido docosahexaenoico). Durante el embarazo se ha establecido que:
- Los niveles maternos de EPA y DHA disminuyeron en el grupo de control;
- aumentó en las mujeres que habían añadido salmón a su dieta.
Asimismo, el EPA y el DHA eran más abundantes en el cordón umbilical de los hijos de estas mujeres.
Más Omega-3 para las madres que no comen pescado
Los resultados del estudio demuestran que las mujeres embarazadas que no consumen regularmente pescado graso pueden aumentar su ingesta de omega-3 introduciendo en su dieta dos raciones de salmón a la semana. De este modo, explican los investigadores, las futuras madres pueden asegurarse de que sus cuerpos y sus bebés reciben los niveles mínimos de EPA y DHA recomendados por los expertos.