Parto prematuro, la suplementación con omega-3 reduce el riesgo de parto prematuro y se asocia a un mayor peso del bebé.
El consumo de aceite de pescado rico en omega-3 durante el tercer trimestre del embarazo puede prolongar la gestación, reduciendo el riesgo de parto prematuro, y favorecer el aumento de peso del recién nacido. La suplementación diaria con 2,4 gramos de EPA y DHA, de hecho, parece prolongar la duración del embarazo en dos días, y se asocia a un mayor peso al nacer de 97 gramos. Estos datos confirman y enriquecen los conocimientos sobre el papel de los suplementos de omega-3 durante la gestación, y su importancia para la salud de la mujer y del recién nacido.
Así lo recoge un estudio publicado en la revista Journal of Nutrition y realizado por investigadores de la Universidad de Copenhague y la Universidad de Gotemburgo (Noruega). El parto prematuro: un problema de salud pública en Europa e Italia Un parto prematuro, o nacimiento pretérmino, es aquel que se produce antes de las 37 semanas de gestación. Cada año nacen prematuramente en Europa unos 500.000 bebés, uno de cada diez.
Se calcula que en Italia el nacimiento prematuro afecta a alrededor del 8% de los recién nacidos, mientras que el nacimiento antes de las 32 semanas afecta a casi el 1% de los recién nacidos. Los bebés prematuros, además de su pequeño tamaño y bajo peso, tienen más probabilidades que los demás de presentar defectos en el desarrollo cerebral y dificultades de aprendizaje en años posteriores. De hecho, los bebés nacidos prematuramente corren un mayor riesgo de desarrollar problemas de crecimiento, del sistema respiratorio, del sistema neurológico, del comportamiento y de las capacidades escolares. Además, las hospitalizaciones son más frecuentes en estos niños y la probabilidad de muerte súbita (SMSL) es mayor.
Además de ciertas condiciones patológicas maternas, como la diabetes, algunos factores fisiológicos o de estilo de vida previos al embarazo pueden aumentar el riesgo de parto prematuro. Entre ellos, los más importantes son:
- edad materna avanzada
- bajo peso u obesidad
- hábitos alimentarios poco saludables
- fumar
- alcohol
- consumo de drogas
- contaminación medioambiental
- estrés y depresión.
- un intervalo demasiado corto entre dos embarazos
- un parto prematuro anterior
En cuanto a la importancia de los nutrientes en el embarazo y los suplementos, los datos del estudio KUDOS realizado por investigadores de la Universidad de Kansas indicaron que la suplementación con omega-3 DHA, en dosis de 600 miligramos al día, durante los dos últimos trimestres del embarazo puede reducir significativamente el número de nacimientos prematuros.
Del mismo modo, una investigación australiana publicada en la revista Prostaglandins, Leukotrienes and EssentialFattyAcids en los últimos meses ha demostrado que la suplementación con DHA se asocia a una reducción del 15% de los embarazos prematuros. Además, numerosos estudios han demostrado que las intervenciones nutricionales que aumentan el DHA, el omega-3 presente en altas concentraciones en las células del cerebro y la retina, son muy importantes para mejorar la salud de los niños prematuros.
Los suplementos de omega-3 reducen el riesgo de parto prematuro
En el nuevo estudio clínico, los investigadores evaluaron los efectos de la suplementación con 2,4 gramos diarios de aceite de pescado durante el tercer trimestre del embarazo sobre el peso y la duración de la gestación. Los resultados confirmaron los datos de estudios anteriores que mostraban que la suplementación con aceite de pescado provoca una prolongación del embarazo y un aumento del peso del bebé al nacer, así como un tamaño del bebé significativamente mayor. Esto sugiere que el aumento del peso al nacer no sólo se explica por la prolongación del embarazo, sino que también es consecuencia de un mayor crecimiento intrauterino. El estudio se suma a un creciente número de publicaciones científicas que apoyan los beneficios de la suplementación con omega-3 durante el embarazo, así como sobre la salud y el desarrollo infantil.
Comentando de forma independiente los términos del estudio, Harry Rice, vicepresidente de asuntos reguladores y científicos de la Organización para el EPA y el DHA (GOED), afirmó que los resultados confirman el papel de los suplementos de EPA y DHA durante el embarazo y cómo las políticas de salud pública deben considerar estos datos siempre positivos.
Algunos detalles de la investigación
Para llevar a cabo el estudio, los investigadores reclutaron a 736 mujeres entre la semana 22 y 26 de embarazo, entre 2009 y 2010. Las mujeres se dividieron en dos grupos, a los que se asignaron aleatoriamente dos tratamientos diferentes. Algunas de ellas recibieron suplementos diarios que contenían cuatro gramos de aceite de pescado, que aportaban 2,4 gramos de omega-3 (55% de EPA y 37% de DHA), mientras que el grupo de control simplemente recibió aceite de oliva.
Los resultados mostraron un aumento de la duración del embarazo de hasta dos días y un aumento del peso medio al nacer de 97 gramos, en relación con la edad gestacional, es decir, el periodo transcurrido desde el inicio del último ciclo menstrual de la mujer.
Futuros estudios profundizarán en el papel de la integración en el periodo periconvencional
Según los investigadores que llevaron a cabo el estudio, la suplementación con aceite de pescado durante el tercer trimestre del embarazo provocó una prolongación de la gestación y un aumento del peso del bebé al nacer. Este aumento de peso se debió a una mayor duración del embarazo y probablemente a un mayor crecimiento intrauterino. Los estudios futuros deberán centrarse en las relaciones dosis-respuesta y en la composición de los suplementos de omega-3 utilizados en la suplementación, así como en su papel general en la mejora de la salud fetal e infantil.
Omega-3 en el embarazo. ¿Qué suplemento elegir?
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Fuente R. Kofod Vinding et al. 'Fish Oil Supplementation in Pregnancy Increases Gestational Age, Size for Gestational Age, and Birth Weight in Infants: A Randomized Controlled Trial'. The Journal of Nutrition.
